Soy un ignorante, y cada día me reafirmo más en mi desconocimiento. Hace cuatro días, como cada año, el Diccionario Oxford eligió la palabra del año POSVERDAD. Resulta que lleva un cuarto de siglo entre nosotros la dichosa palabra y yo tan tranquilo ¡y no sabía ni que existía la dichosa palabra!
- ¿Y eso del Diccionario Oxford? Luis, ¡ilumíname!
- Es el diccionario considerado el más erudito y completo de la lengua inglesa.
- Luis, que te enrollas. ¡Vete al grano!
Viene del inglés post-truth y se refiere a cuando hacemos más caso de las creencias personales que a los hechos objetivos y, después de una decisión, por ejemplo, un referéndum, la verdad queda superada. Recientemente vemos como la emoción o las creencias personales han podido a los hechos objetivos en millones de personas. Una vez elegido el nuevo presidente, la realidad ya poco importa, ¡ya está tomada la decisión! Estoy hablando de el Brexit o la victoria de Donald Trump. En ambos casos, aparentemente, han ganado las creencias (no necesariamente basadas en hechos constatables) sobre las realidades objetivas.

¡Posverdad, cabeza y corazón!
- ¡Luis! No me interesa hablar de política y menos de política internacional.
- ¡Ni, a mí! ¡Quiero hablar de emociones!
En demasiadas ocasiones nos dejamos llevar por los sentimientos, por las impresiones, por nuestras propias creencias (o las de otros) y eso tiene una parte muy bonita, pues nos mueve el corazón… el problema radica cuando dejamos que sea el corazón quien nos guía y dejamos de lado la cabeza. Y al equivocarnos la posverdad nos atormenta.
- ¿Luis, nos estás diciendo que olvidemos el corazón?
- No, rotundamente no. No se puede vivir sin corazón… ni sin cabeza
La teoría es muy bonita, pero es solo teoría. De todas maneras, hay formas de hacer coexistir la cabeza y el corazón:
- Deja que el CORAZÓN te mueva, que tus ilusiones marquen tu meta.
- Haz que tu CABEZA busque los pros y los contras.
- Saca fuerzas de tu CORAZÓN cuando te falten las fuerzas
- Emplea tu CABEZA para ver qué necesitas y qué debes cambiar.
- Usa el CORAZÓN para buscar apoyos en tu entorno.
- Utiliza la CABEZA para cumplir las etapas que te has marcado.
- Aprovecha la motivación de tu CORAZÓN para seguir adelante
- Permite a tu CABEZA que analice posibles rutas alternativas.
- Autoriza a tu CORAZÓN para que disfrute del camino.
- RESUMIENDO: que tu CORAZÓN no esconda la verdad que refleja tu CABEZA
Que el corazón no ciegue tu cabeza
Que tu cabeza no apague a tu corazón
Y si te equivocas… levántate y vuelve a empezar
Hoy, para hablar de lo que dice la cabeza y el corazón me quedo con la canción de Lukas Graham, 7 Years El cantante nos cuenta:
A los siete años mi madre me dijo
Haz amigos, no te quedes solo
Donde la madre actúa como la CABEZA. Más adelante habla con el CORAZON y nos dice:
Yo vi mis metas y no creía en el fracaso
Porque esas voces me hacían fuerte paso a paso
Aprovecha la fuerza de tu cabeza, y que te mueva la ilusión de tu corazón
©Luis Juli Aydillo
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Luis si te alivia, aunque tu de ignorante tienes poco, yo si soy un ignorante y no tengo tanta inteligencia. Lo bueno de estar aquí, es que cada dia, aprendo un poquito más.
Junior!!! Todos estamos para aprender y lo bueno que tiene esta red es el ser un pozo inagotable de sabiduría, como la que tu ns proporcionas!!!
Un abrazo
Bon dia! Hoy me ha resultado especialmente enriquecedor este post. Yo, como una gran parte de la humanidad, lucho en muchas ocasiones por mantener ese difícil equilibrio. Me han encantado los 7 puntos que has aportado para equilibrar corazón y razón. En los dos penúltimos tenemos la esencia. No huyamos de la verdad no nos engañemos, pero que eso no nos quite la ilusión como motor de nuestra vida hacia un futuro deseado. Y si nos equivocamos, nos lamemos las heridas lo preciso y para adelante🏃♀️
Buenas tardes Mariví. Ese difícil equilibrio es el que nos permite mantenernos alerta para obtener la mejor salida siempre. Afortunadamente, como humanos que somos, tenemos el privilegio de podernos equivocar, y el derecho y obligación de levantamos.
Muchas gracias por tus palabras Mariví. Un abrazo.
Estoy totalmente de acuerdo en que lo ideal es una combinación de cabeza y corazón en la toma de decisiones y casi en cualquier aspecto de nuestras vidas. Personalmente, me funciona hacer caso a la cabeza para las decisiones «menores», del día a día, pero es el corazón el que me da la mejor respuesta cuando la decisión es «vital», algo verdaderamente importante. Un abrazo.
Cabeza y corazón, corazón y cabeza, duo perfecto. Aunque cada uno tiene sus propias «querencias» que nos hacen inclinarnos más hacia un lado o el otro. Soy de los que también se apoya muchas veces en parte emocional (corazón) frente a la racional (cabeza). Pero debemos saber escuchar siempre a la otra parte.
Muchas gracias Almaterrena por acercarte a comentar. Un abrazo
Vamos, servido en bandeja.
Nunca mejor dicho
Muchas gracias Marbel!!! Un abrazo!!!
Ya sé que me repito, pero es una posverdad 😉, todo se resume en un JUSTO MEDIO (como decía Lope), en un buen EQUILIBRIO. Pero qué difícil es aplicarlo a la realidad, a esa eterna lucha entre RAZÓN Y CORAZÓN.
Un abrazo.
El equilibrio, dichoso equilibrio el que todos conocemos… en teoría, pero la carne es débil y nos dejamos «desequilibrar» bien por la razón o por el corazón.
Un abrazo enorme Maria
Así es… levantarse y continuar. Con mucho corazón y cabeza. Me ha gustado. Un abrazo
Levantarse y continuar… es la clave. No somos infalibles (afortunadamente) de ahí que podamos caer y recaer.
Me alegra mucho que te haya gustado José Carlos.
Un abrazo
Primera vez que escucho esa palabra, dice el refrán que nunca te acostarás sin saber una cosa más. Qué gran razón.
Cabeza o corazón? Ese siempre es el gran dilema. Yo siempre me dejo guiar por el corazón, y así me va, algunas veces muy bien y otras de pura pena (por no decir otra palabra). En la práctica es muy difícil conseguir ese equilibrio, sobre todo cuando ya estás acostumbrado a guiarte por el corazón…
Ana, me parece que somos más de uno y más de dos los que no habíamos oido la citada palabra.
Me encanta tu expresión «de pura pena» jajajajaj se sobreentiende perfectamente. Dejar que nos dirija el corazón nos lleva a eso… pero también hace que la vida sea apasionante. ¿Lo ideal?, sin duda el casi imposible equilibrio.
Un abrazo Ana
La vida es breve; el arte, largo; la ocasión, fugitiva; la experiencia, falaz y el juicio, difícil. Hipócrates.
|Dentro de 20 años te sentirás más defraudado por las cosas que no llegaste a hacer que por las realmente hiciste, Así que arriésgate, navega lejos de los puertos seguros. Explora, sueña, descubre.
|Eres libre de tomar tus propias decisiones, pero eres prisionero de las consecuencias. Pablo Neruda.
|Es mil veces mas fácil no decir lo que pensamos en un momento de ira, que disculparnos después. Look
|No hay viento favorable para el que no sabe a qué puerto se dirige. Séneca.
|Es muy probable que las mejores decisiones no sean fruto de una reflexión del cerebro sino del resultado de una emoción. Eduard Punset
¡Qué frases más motivadoras, Rosa! Tus siempre interesantes comentarios son el complemento ideal para esta entrada. Si me tengo que quedar con una de las citadas, me quedaría con la de Séneca «No hay viento favorable para el que no sabe a qué puerto se dirige»
Un saludo Rosa
Me gusto’ muchísimo tu articulo…
Te doy las gracias por dejarnos 7 reglas , que tratare’ de no olvidar jamás !
Muchas gracias a ti por tus amables palabras. ¡Nos leemos!
Creo que a los que se expresan en postverdades deberían defenestrarlos trás la primera intentona. ¡Que asco dan! Un abrazo, la entrada estupenda.
En mi pueblo se dice que tanta culpa tiene el que mata como el que tira de la pata. En ocasiones nos dejamos manipular con suma facilidad… y en pocas ocasiones somos capaces de poner en perspectiva la información que se nos da con el interés de ser mínimamente objetivos.
Muchas gracias por tu comentario Carlos.
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Y qué difícil es que corazón y cabeza se pongan de acuerdo, oye!! Y mira que lo intento… jaja. Muy buena entrada y con muy buenos consejos, aunque costos. Un saludo.
Lídia, qué razón tienes al recordarnos lo difícil que es ponerse de acuerdo corazón y cabeza.
Gracias por leerme y comentar!!!!
Por fin llego. Bueno pues he de reconocer que empezaste hablando de política y pensé que estaba en el blog de Icástico jajajjaj.
Luego ya me di cuenta de que la temática era otra.
Lo ideal es el equilibrio si, lo sé, pero a veces es complicado. Sobre todo cuando se es como yo, una apasionada de todo que se deja llevar las más veces por el corazón que por la cabeza…..pero aprendiendo.
Fantásticas las frases finales resumiendo cuándo y cómo hay que usar cada cual. La cita de los martes contigo se está convirtiendo en imprescindible.
Besazos y abrazos.
La teoría nos habla de equilibrio, pero la vida es mucho mas divertida cuando dejamos al corazón que tome la iniciativa… aunque luego no nos queda más remedio que «apechugar» con la posverdad.
Gracias por tu comentario Ana!
En el caso concreto de la elección de Trump, más que los hechos objetivos cuenta cómo han sido presentados. Se ha exhibido a Trump como el enemigo público número 1, por parte de los poderes fácticos de siempre. Y una parte del pueblo llano se ha rebelado. O sea que ha querido llevar la contraria a la progresía mundial.
Y ha tomado la peor decisión (aparentemente) que podría tomarse. Y tanto unos como otros sufrirán las consecuencias.
Porque la gente ha querido dejar patente que por mucho que piensen por ellos, la papeleta está en sus manos.
No se si porque ha ganado el corazón, la cabeza, o la testosterona.
Muchas gracias por tu comentario, Antoniadis. No es mi objetivo criticar o dar la razón a Trump, lo que si es cierto que que se nos llena la boca hablando de respeto y democracia y cuando no sale lo que nos gusta buscamos argumentos para criticar al oponente. Y pasa en EEUU o en mi casa, en política, en deporte o sobre cualquier cosa en la que se opine diferente a uno mismo.
Me encanta tu última frase… cabeza, corazón o testosterona jajaja Buenísimo.
Un abrazo inmenso!!!!
Líbreme Dios o su delegado en la tierra de apoyar a Trump. Solo recordar a Sócrates cuando defendía que la mejor forma de gobierno era ser gobernado por los mejores, los que poseen la mayor capacidad, el conocimiento y la virtud.
No se si Trump es el que tiene más capacidad o conocimiento. Pero que no es el más virtuoso, estoy bastante seguro 🙂
Jajajaaj Me encanta, sobre el virtuosismo estamos totalmente seguro… y sobre lo demás probablemente también jajajajajaj
Muy buena la cita de Sócrates!!!
Ay, tampoco conocía la palabra. Aprende una todos los días, genial. El tema de hoy me ha encantado. No hay que perder la perspectiva por los sentimientos, tampoco callar al corazón. Un abrazo.
Gracias por tu comentario Melbag. Sin sentimientos la vida sería un erial de dureza insostenible. Empleemos la cabeza…. pero no olvidemos al corazón.
Sin olvidar el corazón. Así es.
Olvidarse del corazón es sinónimo de muerte, como bien sabes, Melbag. ¡No lo podemos olvidar! Por cierto, corregí la errata, ponía, sin querer, «olvidemos el corazón» terrible errata.
Yo te entendí y el que te conoce estoy segura que sabe que lo que quisiste decir. Eres mucho corazón, amigo. Un abrazo.
Gracias por entenderme!!!!
Un post muy enriquecedor e interesante, me ha encantado, un besito!!!
Muchas gracias por leerme y comentar, Flor!!!
Disfruta de una buena tarde y un abrazo!!!
Un post estupendo,con una magnífica reflexión!! Creo que tanto la cabeza como el corazón deben ir juntitos, aunque a veces se separen y domine uno al otro.Gracias por compartir,un fuerte abrazo
Gracias a ti, María, por tu comentario. Siempre dominará uno de los dos, mientras no «saque» demasiada ventaja a la otra parte, no pasa nada.
Un abrazo inmenso Maria
Como siempre bonita entrada. Me la tendré que aplicar porque yo me dejo llevar más por el corazón que por la cabeza y ésta última de vez en cuando protesta. Un cordial saludo
Lo malo no es que nos dejemos llevar por una de las partes, lo malo es no ser consciente y no poner remedio en las decisiones que realmente importan en la vida.
Un abrazo!!!!
Y qué difícil resulta ese equilibrio, Luis! Cabeza, corazón. Siempre enfrentados. Uno tira de ti y la otra también. Y nunca sabes si te equivocas o no. En mi caso suele ganar el corazón, pero sé que muchas veces me equivoco. Ya debería haber aprendido, pero algún día lo haré.
Estupendos tus siete puntos. Tomo nota 😉 😉
Besazos de sábado, amigo mío.
Muchas gracias por tu comentario María. El secreto es una conexión armónica, en la que no gana uno sobre el otro sino que ganan los dos… eso dicen las teorías, pero, entre tu y yo, el corazón es el que nos mueve!!! Un abrazo Maria y buena semana
Aquí una entradilla que incluye esa fea palabreja: https://blogdefabio.com/2016/11/22/mas-neologismos-la-mesa-esta-servida/
jajajaja Hola Fabio, coincidimos en el día y la misma palabreja. La globalización llega al lenguaje y a los neologismos. Buena entrada la tuya Fabio. Disfruta de una buena semana!!!!
«Amo y pienso,
¡qué mala combinación…!
Pienso,
y mi razón me dice,
«piensa y no ames, sólo te traerá dolor»
Amo,
y mi corazón me dice,
«ama y no pienses, aunque te traiga dolor»
Algunas veces pienso,
otras veces amo.
Muchas, pienso y amo,
amo y pienso…
Corazón y razón,
en pugna uno con otro…
¡ay, amor!
¡que me puede el corazón!»
Este poema se refiere al amor, pero puede ser dedicado a cualquier cosa en esta vida que hacemos de corazón… yo siempre me dejo llevar por el corazón y así me luce el pelo…
Un abrazo, Luis.
Lo ideal sería que el corazón y la razón tuviesen armonía entre ellos. Como no siempre sucede así, tal vez nos haga sufrir más el corazón, pero también nos dará más satisfacciones.
Bonito poema, Estrella!!!
Buena noche sabática y espero que mañana tengas una buena jornada dominical.
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Muchas gracias Frank por recomendar este post a tus lectores. Un abrazo
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